Supone volver a los orígenes, a la forma que tenían tus abuelos de afeitarse, al galán y al gentleman. Te compartimos nuestra particular guía para iniciarse en el afeitado clásico.
¿Qué es el afeitado tradicional?
Era una práctica muy popular llevada a cabo por barberos encargados de arreglar la barba a sus clientes más como una especie de ritual que como un simple servicio. El afeitado tradicional consiste en dejar la piel totalmente desprovista de vello utilizando una navaja profesional.
Beneficios del afeitado clásico
Cuidas más tu piel: es menos invasivo que las maquinillas de afeitado modernas, las cuales cuentan con hasta 5 cuchillas. El estilo clásico incluye una sola cuchilla que puedes pasar hasta dos veces consiguiendo un mejor afeitado con menor irritación.
Ahorras más dinero: una maquinilla de afeitar clásica aguanta muchos años y solo implica comprar cuchillas, las cuales son de lo más económicas.
Alternativa sostenible: las maquinillas tradicionales son 100% reutilizables y han sido concebidas para su uso en un tiempo más prolongado. Por su parte, las maquinillas de afeitar actuales están hechas en gran parte con materiales plásticos que no son biodegradables.
Lo necesario para un afeitado tradicional
- Brocha: ideal para hacer espuma con jabón y aplicarlo al rostro.
- Jabón: también compatible con crema o espuma de afeitar.
- Aceite preafeitado: el mejor aliado para preparar tu piel y hacer que el afeitado sea menos invasivo.
- Piedra de alumbre: funciona como astringente en caso de sufrir un pequeño corte.
Cómo hacer un afeitado clásico
1. Junta todos los elementos necesarios para llevar a cabo el ritual.
2. Prepara tu piel humedeciéndola con un poco de agua tibia para que el efecto hidratante sea más efectivo.
3. Protege tu piel con aceite preafeitado para antes del afeitado y así mantener tu piel más tersa e hidratada.
4. Enjabona el rostro para evitar posibles cortes o irritaciones.
5. Da una sola pasada en relación a la dirección en que crece el vello, aunque puedes hacer hasta tres.
6. Si has sufrido algún corte, aplica jabón en tu rostro para humectarlo. Después, aplica un after shave para después del afeitado a fin de hidratar tu piel.
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